¡Olvídate del AZÚCAR EN SANGRE! ¡Solo un plato y lo agradecerás! ¡Es un verdadero tesoro!

Ingredientes:

250 gramos de frijoles rojos, enjuagados
Agua
1 cebolla grande, picada
2 tallos de apio, picados
Pimiento picante (opcional)
Aceite de oliva
1 cucharada de pimentón
2 tomates, picados
Sal

Hojas de cilantro fresco, picadas (opcional)
2 dientes de ajo, picados (opcional)

Instrucciones:

Cocine los frijoles: En una olla grande, agregue los frijoles rojos enjuagados y cúbralos con agua limpia. Lleve el agua a ebullición, luego reduzca el fuego y cocine a fuego lento durante 1 a 2 horas, o hasta que los frijoles estén tiernos.

Escurra los frijoles, reservando aproximadamente 1 taza del líquido de cocción.
Saltee las verduras: En una sartén grande o en una olla holandesa, caliente el aceite de oliva a fuego medio. Agregue la cebolla picada y el apio y cocine durante 3 a 5 minutos, o hasta que se ablanden.

Si está usando un chile, agréguelo a la sartén en este momento (con semillas adentro o afuera, según el nivel de picante deseado).
Sazonar y cocinar a fuego lento: Sazonar las verduras con pimentón y sal a gusto. Agregar los tomates picados a la sartén y cocinar a fuego lento durante 1 o 2 minutos más.
Agregar los frijoles y el caldo: Agregar los frijoles cocidos y aproximadamente 1 taza del líquido de cocción reservado a la sartén con las verduras.

Triturar aproximadamente ¼ de los frijoles con un machacador de papas o una licuadora de inmersión para espesar un poco el guiso. Cocinar a fuego lento durante 2 o 3 minutos más o hasta que esté bien caliente.
Servir: Decorar con cilantro fresco picado y ajo picado (opcional) y servir inmediatamente.

Consejos:

Puede agregar otras verduras a este plato, como zanahorias picadas, pimientos morrones o papas.
Si no tiene cilantro fresco, puede sustituirlo por cilantro seco.

Las sobras se pueden guardar en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días. Recalentar suavemente en una cacerola o en el microondas hasta que se caliente por completo.